Únete al desafío de añadir vida a nuestros años. En este apartado queremos ofrecer información sobre cómo podemos mejorar nuestros estilos de vida, para promover la salud y la resiliencia cerebral.
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Te invitamos a participar en el desafío de entender por qué ajustar nuestros hábitos alimenticios a la dieta mediterránea ayuda a promover la resiliencia y la salud cerebral.
La dieta mediterránea enriquecida con nueces y aceite de oliva protege del deterioro cognitivo. El consumo de verduras, frutas, legumbres, frutos secos y al menos tres porciones de pescado cada semana, incluyendo aceite de oliva, cereales integrales y pequeñas cantidades de vino; limitando la carne roja, ayuda a reducir el deterioro cognitivo.
Cuidar la dieta mejora la salud cerebral y la salud cardiovascular. Una inversión de alto rendimiento.
Promover el consumo de proteínas vegetales y de pescado (especialmente aquellos ricos en ácidos grasos omega-3), verduras frescas, frutos rojos, nueces y té, promueven la salud y la resiliencia cerebral.
Las recomendaciones de Harvard Medical School sobre una dieta más saludable para nuestro cerebro.